Con el Hacha de Marduk, el grupo de Fujimaru logra debilitar a Gorgon reduciendo su Divinidad. Habiéndose abierto un camino para ellos mismos, finalmente llegan a las profundidades del Fuerte de Sangre. Allí, Gorgon dice que se vengará destruyendo a la humanidad. Ana desata su propia divinidad, hasta ahora reprimida, contra Gorgona